domingo, 4 de octubre de 2015

Cantante o alcaldesa


Estos dos enlaces son muy interesantes…dos puntos de vista, dos maneras de vivir, dos personas diferentes, dos actitudes distintas…
Tengo cáncer. Me lo diagnosticaron hace casi 4 años. Es una grave enfermedad. En mi caso incurable.
El cáncer me ha robado poder pasear por el Paseo Marítimo de la mano de mi marido a los 80 años, vestidos los dos con el mismo chándal(como los guiris viejecillos…jajajaja…). Tengo la seguridad de que no conoceré a mis nietos, y la sensación de que no veré a mis hijos hacerse adultos. Yo tenía planeado que cuando fuese una jubilada, quedaría con mis amigas para ir al cine, o ir a tomar un café; echar una tarde con “las chicas de oro”, porque todas seríamos muy viejecitas pero muy marchosas…
El cáncer me ha robado mucho tiempo. Por eso no dejo de pasear con mi marido de la mano cada vez que puedo, disfruto al máximo cuando tengo que comprarle ropa nueva a mis hijos porque se les ha quedado pequeña; me encanta verles crecer. Quedo con mis amigas muy a menudo y nos decimos que nos queremos siempre.
                Tengo mis bajones, pero están en relación directa a mi esperanza de vida (de 3 a 5 años). Por eso no les doy más de tres a cinco minutos.
                El día que me diagnosticaron entendí que ante este “robo a mano armada de mi tiempo de vida” me habían regalado la clarividencia de que mi única opción era VIVIR. Y eso implica ser y hacer feliz. Al hacer feliz a los demás, esa felicidad vuelve a ti, seguro!
                Yo no soy ni alcaldesa ni cantante de renombre, por eso mi opinión no tiene la misma repercusión. Admiro la fortaleza y optimismo de la alcaldesa. Siento la tristeza del cantante…
                Soy una abanderada de la normalización. Me encanta decir “cáncer”. Me encanta decir que tengo cáncer y soy feliz. Soy una provocadora porque estoy orgullosa de vivir con cáncer? Porque vivo alegre con cáncer? Por vivir desde el agradecimiento? Pues lo seré…
                Tengo un grupo de amigas en la aecc de Fuengirola que son fabulosas. Algunas pasaron por el cáncer, otras lo vivieron como familiares, algunas son metastásicas como yo, y otras son “sanas”, pero están tan implicadas en la aecc que parece que ellas también son pacientes…Me sienta afortunada por conocerlas y tenerlas en mi vida; aprendo de ellas diariamente. Me enseñan tanto…. Tienen vidas y actitudes ejemplares; cada una vive el cáncer a su manera. Son grandes grandes y fuertes fuertes…hermosas por fuera y espectaculares por dentro. Ellas no cuelgan sus experiencias y sentimientos en sus Facebook, pero os aseguro que son un modelo a seguir.
                ¿Me salgo de lo normal por decir que me siento dichosa porque el cáncer ha traido a mi vida muchas cosas buenas y personas maravillosas?...pues me salgo de lo normal….
Una amiga me dice que le parece muy injusto que yo tenga cáncer. A mi también me lo parece, pero como no lo he podido elegir, lo vivo lo mejor que se.
                Yo no lucho contra el cáncer. No quiero ganar la batalla. No soy una superviviente ni una sobreviviente del cáncer. Soy una “viviente”. Yo VIVO con cáncer; y deseo hacerlo mucho tiempo.





martes, 21 de octubre de 2014

Me ato los cordones, y sigo caminando.

      Lo que todos los pacientes de cáncer deseamos cuando comenzamos un tratamiento de quimioterapia es terminar pronto para volver a la "normalidad".
      Lo que definiríamos como "normalidad", sería volver a hacer las mismas cosas que hacíamos antes. Llevar el mismo ritmo de vida, trabajo, familia, amigos, salidas, ropa,...etc....
      Y lo que no sabemos antes de comenzar, es que nada va a ser lo mismo...No va a ser ni mejor ni peor, simplemente que no será igual.
      No sólo porque nuestras uñas tardarán casi un año en volver a recuperar su dureza, la piel hay que cuidarla más porque sufre con la quimio, recuperar el pelo, su densidad y espesor, etc,etc.... De la misma manera, nuestro modo de entender la vida también se verá modificada.
      Un día, de pronto, el cáncer le echa el freno a nuestra vida. Y desde ese mismo día, nuestro interior se ve alterado. El concepto de prisa, de estrés,de urgencia, de importancia, de amor, el concepto de nunca, siempre, tal vez, alegría, miedo, cariño, sinceridad.....cambia de manera significativa. Ya no es como antes.

      Pero un día ocuerre. También de repente, sucede. Llega el informe del medico donde dice: "libre de enfermedad". Ese es el ultimo paso que se  da para alcanzar la "normalidad". Esa normalidad consiste en espaciar las vistas al hospital, al oncólogo, a las analíticas y a las pruebas radiológicas; esa normalidad que creemos que será volver a ser la que fuimos antes de nuestro diagnostico. Y eso no ocurrirá porque no seremos las mismas personas, nuestras vivencias de esos meses, nos cambiarán y transformarán, para hacer de nosotros los hombres y mujeres que resurgirán de la quimio y el trayecto atravesado por el cáncer. Ni mejores ni peores, pero ese paréntesis que hemos realizado en nuestras vidas, cuando lo cerremos, con el informe del médico en nuestras manos, no nos va a devolver al día anterior al que se movió la tierra bajo nuestros pies. Esos papeles escritos en el ordenador y firmados por nuestro oncólogo, nos dan la libertad de poder decir: yo he superado un cáncer. Y a partir de ahí seguir reconstruyéndome como persona y seguir viviendo esta vida tan maravillosa que me ha mostrado el cáncer.

      Y todos aquellos pacientes que nuestro objetivo es convertirnos en enfermos crónicos, ya que el estadío de nuestro cáncer no nos da otra posibilidad, aprendemos a vivir con cáncer. Y cuando llega una nueva etapa de nuestro diagnóstico donde hay que parar esa normalidad que adquirimos en nuestro continuo tratamiento, esa para es sólo: pararnos para atarnos los cordones de los zapatos, y seguir caminando. Sin duda alguna!!


viernes, 13 de junio de 2014

I Jornada Malagueña para Pacientes con Cáncer

El sábado 7 de junio , se celebró la tan esperada I Jornada Malagueña de Pacientes con Cáncer.
Desde que comenzamos a gestar la idea que finalmente se hizo realidad, uno de nuestros miedos era saber cuánta gente acudiría.
Lo que comenzó siendo una charla para un grupillo de unas 50 personas, ha acabado siendo una Jornada para mas de 200 personas.
Se ha dado lugar al encuentro entre pacientes y voluntarios; profesionales de la salud y pacientes. Familiares y enfermos; voluntarios y mas voluntarios....
Tengo la sensación de que hemos alcanzado el objetivo: facilitar el encuentro entre pacientes y médicos, hemos ofrecido un espacio diferente a las consultas o las salas de espera para redescubrirnos todos, se ha podido resolver dudas y preguntas, consultas generales y particulares. Se ha podido ofrecer unos talleres originales, muy interesantes y variados. Han tenido gran aceptación. Los participantes terminaron con ganas de mas.
Hemos aprendido mucho de los médicos. Creo que ellos también han aprendido de nosotros. Ha sido un privilegio poder contar con la calidad profesional y humana del personal que ha participado de manera altruista en las mesas, ponencias y talleres. Desde este rinconcito que es "Rocío cuenta" , les envío mi agradecimiento mas sincero y profundo.
Los asistentes a la Jornada , ademas aportar entusiasmo, interés y curiosidad, no protestaron en ningún momento por aquellos errores de novatos que fuimos cometiendo en la organización y desarrollo de la Jornada. Esto debe ser por la calidad de las personas que acudieron estaba por encima de los desatinos que pudimos cometer.
Recuerdo con mucho cariño y gran asombro, positivo, la implicación, generosidad y disponibilidad que los profesionales con los que contactamos presentaban a la hora de responder a nuestra propuesta. Pero ahora, una vez hecho realidad este sueño, que en un principio fue utopía, más me asombra , agradablemente, el ofrecimiento de muchos de ellos para formar parte de las II Jornadas. Su sentimiento de formar parte de esta aventura a la hora de evaluar para mejorar esta magnifica oportunidad de intercambiar información y formación.
No tengo ninguna duda que este hecho nace de la vocación de enamorados de su profesión que alimenta a esta labor. Médicos, enfermeras, auxiliares, y ese largo etcétera que forman parte de la vida de los pacientes de cáncer.
Tenemos muchas cosas que mejorar, aspectos que limar, unos que eliminar y otros que potenciar

Desde la aecc estamos deseando que pase un año, para poder disfrutar de las II Jornadas de Pacientes con Cáncer.
Y mientras llega ese momento seguiremos todos "Abrazando la vida", con mucho corazón.....